Miguel A. Gallego
En el caso de Mutua MMT Seguros, su nacimiento en el año 1932, obedeció a la necesidad de protección de un grupo de taxistas que se constituyeron como aseguradores de los daños que, tanto ellos como sus respectivos vehículos, pudieran sufrir en el desarrollo de su profesión. Según explica su presidente, Román Rodríguez Casas, “A día de hoy, son cientos de miles de españoles, los que nos han dado su confianza, y saben que pueden contar con nosotros en caso de sufrir un percance, sea cual sea, la gravedad de éste”.
¿Qué valores aporta a su cultura corporativa y a la proyección mediática de MMT el patrocinio deportivo?
Considerando el espíritu del concepto mutual, en el que el beneficio de la gestión del negocio debe revertir necesariamente en los mutualistas, nuestra cultura corporativa no puede ser ajena a ello.
Mi visión conceptual de la cultura corporativa, se corresponde con las definiciones que la enmarcan dentro de un conjunto de valores existentes en una organización que la identifica y la diferencia de otra, haciendo que sus miembros se sientan parte de ella. Así podemos afirmar rotundamente, que la identificación con el patrocinio deportivo es plena, tanto por el capital humano que compone Mutua MMT Seguros, como por sus mutualistas. Consideramos que el deporte vincula a los niños y jóvenes con hábitos saludables y que consigue acercarles aún más a sus familias con la participación de todos ellos en los diferentes ámbitos que el deporte les ofrece. Mutua MMT Seguros, presume de ser una gran familia y acorde a esa cultura corporativa emprende sus acciones.
Cuando nos reunimos con el Real Madrid, hace ya cuatro años, para valorar conjuntamente el patrocinio de su sección de Baloncesto, en un primer plano y por ambas partes, se expusieron los valores coincidentes de las dos Entidades y su interés en aportar algo más en relación a ellos.
Tanto el Real Madrid C.F. como Mutua MMT Seguros son entidades que se caracterizan por su seriedad y entrega a sus aficionados y mutualistas respectivamente, pero también es absolutamente destacable, el recíproco compromiso en avanzar en esa misma línea y afrontar retos, que lejos de meros intereses comerciales, reflejen esa verdadera personalidad que sin duda alguna las hacen diferentes.
La proyección mediática de cualquier marca vinculada a un club como el Real Madrid C.F. es absolutamente indiscutible, pero insisto, en que no sólo fue eso lo que nos hizo y hace sentirnos cómodos con nuestro patrocinio, sino que junto a los intereses comerciales que son inherentes a cualquier gestión empresarial, coincidía esa predisposición a la defensa de muchos valores sociales, en los que ambas entidades se sienten reflejadas.
