Sara Bieger, presidenta de la Cámara Franco- Española
Jesús Torres Mateos, presidente de AEDRH
Pablo Pereiro Lage, presidente y CEO de Grupo Squirrel
Gerardo Mariñas González, consejero delegado de GroupM
José Luis Barceló, autor de “Cambio climático sin complejos”
Manuel de los Santos
José
Luis Barceló es periodista, divulgador y escritor. Actualmente es director de
ElMundoFinanciero.com y ha sido fundador de medios de comunicación de éxito
como ElSemanalDigital.com o RadioYa.es. Es un conferenciante controvertido y
provocador, y ha sido miembro muy activo del Tercer Sector. En 1978 fue Premio
Príncipe de Asturias para jóvenes investigadores por un trabajo sobre especies
protegidas. Recientemente ha publicado “Cambio Climático sin complejos”,
publicado por Editorial Sekotia, en el que cuestiona algunos de los dogmas de
los momentos actuales. ¿Existe realmente el cambio climático? Barceló no lo
niega, no ha escrito un libro negacionista, sino, como él mismo dice,
“revisionista” acerca de los cambios que sufre el Planeta.
¿Qué es lo que ha motivado este ensayo reflexivo?
Hoy
nadie duda de que el cambio climático exista, es un estado de ánimo o de
opinión generalizado y apoyado por los medios de comunicación, los políticos y
las empresas. Mi punto de partida era ponerle reflexión al cambio climático,
desposeerlo de la parte ideológica o política que tiene e intentar razonar
acerca de lo que realmente hay de cambio climático sin pasiones o, como decimos
en el título, “sin complejos”. El libro se ha convertido en realidad en una
especie de manual de combate contra las doctrinas imperantes acerca del cambio
climático, que en el libro no negamos, sino que lo que hacemos es poner todos
los datos juntos encima de la mesa y ordenarlos, descriminalizando la
responsabilidad que el Ser Humano pueda tener. Con este libro intentamos
provocar la duda y la discusión, madres de la Ciencia, para que cunda el
razonamiento.
¿Qué postulados de esos que desde siempre ha mantenido
el ecologismo pone en duda?; ¿por qué?
Yo
me siento ecologista y he practicado incluso el ecologismo político. Pero creo
que algo tan serio como parar el progreso y el desarrollo humano en aras de una
supuesta protección medioambiental es un flaco favor al Ser Humano como
especie. La opción de limitar el crecimiento y desarrollo en un supuesto
beneficio del Medio Ambiente no debe ser una opción. Llevamos un año de “parón”
industrial por culpa del COVID-19: lo que no han conseguido los activistas del
ecologismo urbano de extrema izquierda ni Greta Thunberg, lo ha conseguido un
bichito muy pequeño. Ya no hay coches en las calles de las ciudades ni surcan
los aviones nuestros cielos. Sin embargo, nadie nos dice que este “parón”
industrial, que ha llevado a la ruina a medio planeta, haya servido para algo
desde el punto de vista del cambio climático. Nadie nos dice si van mejor las
emisiones de CO2, y hay más o menos deshielos, si los mares se recuperan… No
nos dan datos para saber lo que ocurre de verdad.
Debemos
tratar de evitar ser ecologistas “urbanos”. Los ecologistas hemos pecado de
“echar” hacia un lado al Humano, como si no fuera parte de la Naturaleza. Antes
de los Humanos hubo, que se sepa, cinco extinciones masivas, y ahora se culpa a
los humanos de provocar la sexta. El problema reside en nuestra visión
medioambientalista con un enfoque demasiado urbano. La concentración en grandes
urbes es un proceso creciente igual en todos los países del mundo, da igual que
sean ricos o pobres. Algunas de las mayores ciudades del mundo, como Calcula,
Estambul, México o El Cairo cuentan con 15 o 20 millones de habitantes. Las
ciudades son grandes absorbedoras de recursos, y emiten también muchos
residuos, concentrados en un solo punto del mapa, lo que nos genera distorsión
acerca de los problemas reales del medioambiente.
Ser ecologista es ser incómodo, inconformista,
controvertido y hasta si me lo permite, polémico, lo que coincide con el
espíritu inconformista de su libro. ¿Por qué somos tan diferentes los humanos
del resto de la Naturaleza?
Si,
ya le decía antes de mis tendencias provocativas. Vivir en la ciudad y ser
ecologista, es contradictorio. Tenemos que volver a poner al ser humano en el
centro de las cosas, no puede ser que suframos más por un perro o un geranio
que por una persona. Esto viene mucho de la cultura “Disney”, que “humanizó” a
los animales. En la ciudad estamos llenos de mentiras que circulan con
velocidad. Mientras la verdad todavía se está atando las zapatillas, la mentira
ha dado ya la vuelta al mundo varias veces. Recordemos la triste fotografía del
cormorán encharcado de petróleo durante la Guerra del Golfo: dio la vuelva al
planeta y todo el mundo se apenó. Sin embargo, no nos importaron los colegios y
hospitales destruidos, las familias rotas y los niños muertos en los ataques.
Con las redes sociales la velocidad de lo que nos interesa en nuestro refugio
doméstico se acrecienta, muy por encima de lo que verdaderamente debería
importarnos. Asistimos a un divorcio real entre la vida en el campo y la vida
en la ciudad que nos aleja de la visión tradicional.
Eva María Belinchón Sánchez, consejera delegada de Grupo Maser
Carmen Peñalver
La
calidad del producto y la excelencia en el servicio que proporciona a sus
clientes, permite a Grupo Maser ser líder. Es una empresa familiar con una
experiencia de 45 años, formada por un equipo de profesionales comprometidos y
alineados para dar solución a empresas y particulares en diferentes entornos.
Han desarrollado un sistema de trabajo muy eficaz con los últimos avances
tecnológicos. Su apuesta por las tendencias más actuales les permite estar
presentes y disponibles en internet y en las redes sociales donde sus clientes
pueden encontrar información directa y actualizada de todos los servicios de
las tres empresas que componen el grupo: Maser, Soprobel y Lusso and Prodec.
Háblenos
del Grupo Maser. ¿Qué compañías lo integran y en qué sectores y actividades
están presentes?
Grupo Maser está integrado por tres
empresas que se dedican a sectores diferentes, Maser, sector industrial; Soprobel,
sector servicios; y Lusso and Prodec, sector HORECA
Háblenos
de los pilares del grupo, o sea, marcas, nueva empresa, etc.
Maser como empresa madre fue creada hace
45 años dedicada a la distribución de algunas marcas en España, Portugal y
Angola. Hace unos años, pensamos que debíamos expandir nuestro know how a otros países y para ello
comenzamos la aventura de la creación de tres marcas propias Belcare, Bellux y
Belcut
Tienen
cuatro áreas de negocio,
detállelas. ¿Bajo qué marcas propias y cuáles son los perfiles de sus clientes
para cada una de ellas?
Maser, nuestra empresa madre, se dedica
a la comercialización y fabricación de maquinaria y utensilios para la
industria de la piedra, cerámica, el vidrio y la construcción.
Soprobel, se dedica al tratamiento de
superficies de piedra y cerámica, aprovechando el gran conocimiento que tenemos
en este campo y nuestra dilatada experiencia en este sector.
Por último, Lusso and Prodec es una
empresa dedicada al sector HORECA. Comercializamos maquinaria de café,
porcelana y café tanto en grano como en capsulas.
Aunque
el espíritu empresarial de la familia les ha llevado durante estos años a
abordar más proyectos, ¿es emprender e innovar algo presente en su día a día?
Como empresa familiar, uno de nuestros
pilares es la conservación de nuestras empresas a largo plazo y por ello
debemos adaptarnos a este mundo que está cambiando constantemente. Desde que
era niña, mi padre nos enseñó a que hay que trabajar duro para conseguir lo que
uno desea y que hay que estar en continua evolución, no podemos quedarnos
parados y ello lo hemos llevado a cabo introduciendo productos innovadores
continuamente, adaptando nuestras empresas a las últimas tecnologías y
emprendiendo en otros sectores.
España
es un país de pymes y empresas familiares. ¿Cuáles son los puntos fuertes de
este último tipo de empresas? ¿Qué significado le daría usted a la palabra
“compromiso”?
Uno de los puntos fuertes de las
empresas familiares es nuestro sentido de la continuidad, no tenemos empresas
para venderlas en unos años, pensamos en lo que nuestros progenitores han
creado, lo conservamos y nuestro objetivo es que perdure en la figura de
nuestros hijos. Ello nos lleva a pensar en el largo plazo, ser cautos con las
inversiones, pensar en la liquidez de nuestros negocios, en definitiva, ser
conservadores.
Tenemos un gran compromiso, ya que
nuestros padres han confiado en nosotros para perdurar lo que han creado y ello
nos lleva a estar comprometidos e implicados.
Cuando
se habla de profesionalizar la empresa familiar, ¿a qué nos referimos? ¿Cómo se
organiza ese importante paso? ¿Y cómo se aborda e implementa un tema tan
crítico como el relevo generacional?
Pienso que la profesionalización de las
empresas familiares es algo fundamental, captar talentos fuera de la familia
que nos ayuden a crecer y a ver las cosas desde una perspectiva diferente. Las
empresas familiares normalmente continúan su dirección con la siguiente
generación, pero debemos pensar que la persona que nos releve no debe estar ahí
sólo por ser familia, debe ser una de las mejores preparadas, un apellido no te
da derecho a dirigir una empresa, hay que ganárselo. Por ello, estamos preparándonos desde que
somos pequeños, quizá nos exigen mucho para poder algún día relevar a nuestros
padres, pero ese esfuerzo tiene su recompensa a largo plazo.
Las empresas
familiares tienen muchas peculiaridades porque estamos mezclando familia y
trabajo, pasamos las vacaciones, las navidades con nuestros jefes, hermanos,
primos, y luego trabajamos juntos cada uno en su puesto en el día a día. Esto
no es fácil, pero debemos pensar que cuando estamos en la empresa, la familia
no es la prioridad, es la empresa, y la gente que trabaja con nosotros y
debemos desempeñar nuestro cargo con la mayor profesionalidad posible.
Pablo González Ruiz de la Torre, CEO y fundador de Trivu
Arturo Díaz
Trivu
nace en el año 2015, bajo el nombre de Pangea, con el único objetivo de, en un
contexto de tremendo pesimismo y negatividad, volver a poner el valor, el
talento y potencial de las nuevas generaciones. “El sentimiento que realmente
me llevó a fundar la empresa cuando yo tenía 19 años, fue la tremenda
frustración con la que vivía por ver cómo era infravalorado por mi edad. Sólo
quería empezar a sentar las bases de mi futuro profesional y parecía que el no
tener experiencia ya era motivo suficiente como para “no valer”, explica Pablo
González Ruiz de la Torre, CEO y fundador de la empresa.
Trivu
funciona básicamente con un binomio “personas y partners”. Defínalos.
Efectivamente. Trivu es un ecosistema global que
precisamente interconecta todo tipo de personas en cualquier parte del mundo
con múltiples organizaciones tanto públicas como privadas. Estamos convencidos
que frente a la ya conocida, y, por supuesto, muy necesaria transformación
digital, lo que realmente necesita el mundo, ahora más que nunca, es una
potente transformación cultural que siente las bases de un nuevo modelo social
y económico que nos permita, poniendo a las personas y a las empresas en el
centro, impulsar una nueva etapa en nuestra historia. Sin embargo, nada de esto
es posible si no hacemos de nuestro talento y talante el verdadero dinamizador
de este proceso de transformación. Tenemos claro que si algo tienen en común
todos los grandes cambios que ha vivido la humanidad a lo largo de los últimos
cientos de años, es que éstos se han conseguido afrontar cuando hemos sido
capaces de trabajar, actuar y responder en equipo a cualquier tipo de
situación. Por eso, desde Trivu trabajamos día a día para conseguir crear un
nuevo paradigma que relacione, conecte y vincule, como nunca antes, a las
organizaciones con las personas que las forman.
¿Qué
servicios prestan a sus clientes y de qué sectores de actividad económica?
Desde Trivu acompañamos a todo tipo de organizaciones,
o partners, en la transformación que
creemos firmemente que será la clave para afrontar los retos y aprovechar las
oportunidades que esta nueva década plantea: la humana. Ahora más que nunca,
las empresas necesitan volver a poner al talento en el centro de todo lo que
son y hacen. Por eso, trabajamos mano a mano con cada una de ellas
acompañándolas en su evolución hacia un nuevo modelo de relación entre las
organizaciones y su propia gente. Desde definir la propuesta única y
diferencial que una empresa tiene para el talento que busca y tiene, pasando
por crear nuevos modelos de aprendizaje, desarrollo y liderazgo, hasta la
implementación de nuevas e innovadoras estrategias de marca empleadora o de
comunicación interna. En definitiva, para cada reto que una empresa pueda tener
desde el punto de vista de su talento, cultura u organización, nuestro
compromiso es siempre ofrecer una solución que aporte valor real y sostenible,
con un enfoque diferente y desarrollada de forma auténtica y coherente con la
realidad de cada equipo.
Sobre
la gestión del talento en la nueva normalidad: ¿cómo puede mantenerse enamorados a nuestros
equipos desde casa? ¿Qué es lo que valora el talento interno en esta nueva
normalidad?
Ante el
contexto desencadenado por la COVID-19, mantener a nuestros equipos
enganchados, ilusionados y proactivos es un desafío que, por suerte y por
desgracia, no tiene fórmula mágica. Es ahora cuando, más que nunca, las
empresas tienen que dejar atrás el miedo a conectar y hablar con las personas
que forman parte de su organización. Como líderes, la única forma que tenemos
para realmente conseguir mantener enamorados a nuestros equipos es, primero,
sabiendo como están, cómo se sienten para entender de verdad lo que necesitan.
Es ahora momento de aprender a preguntar, no dando nada por hecho en ningún
momento. Todo ello, con el objetivo de pasar de la queja vacía a generar una
cultura que te permita involucrar a tus equipos en las soluciones que ellos
mismos puedan construir.
Elena del Valle García, CEO y Funder de AMF by Amalfi
Fernando Montes
AMF
by Amalfi es una marca española de joyas con personalidad propia, sabor
italiano y con una gran historia que contar detrás. Su creadora, Elena del
Valle, decidió lanzar su propio proyecto profesional como emprendedora. Un
viaje a la Costa Amalfitana albergaría algo más que un simple cúmulo de bonitos
recuerdos y acabó dando vida a la marca, que huyendo de lo convencional, se
centra en diseños exclusivos inspirados en los diferentes pueblos de esta costa
del sur de Italia, pero sin perder de vista la tendencia del momento y que
desde el principio ha tenido un sello de distinción, convirtiendo la pieza en
algo más que una joya. Un pequeño taller en Madrid con años de tradición es el
encargado de dar vida a las joyas siguiendo el método tradicional de la
fundición a la cera perdida.
¿Cuál
es la historia de Amalfi? ¿De dónde surge la idea para crear una marca de joyas
diferente al resto?
Hacía tiempo que quería crear una marca
de joyas que tuviera un valor diferencial y que contara una historia
inspiradora detrás. Cuando empecé a definir los valores de la marca tenía muy
claro que los diseños de las joyas debían ser propios, la fabricación de las
joyas tenía que ser en un taller español y, sobre todo, que las colecciones
tuvieran alma e historia.
Entonces recordé un viaje que hice a la
Costa Amalfitana en el que descubrí un escenario que me cegó con su luz
especial, el azul intenso del mar y los múltiples colores que visten a sus
pueblos y paisajes. Cada rincón contenía historia, artesanía, elegancia y
sencillez.
Todo ello fue el componente clave para
dibujar y dar vida a la marca AMF by Amalfi y a sus diferentes colecciones. Ya
que cada colección está inspirada en una característica concreta de cada pueblo
de la Costa Amalfitana.
¿De
dónde viene su interés por el mundo de la joyería? ¿Por qué una empresa de
joyas?
Siempre me ha gustado mucho el mundo de
la joyería y de los complementos. Hacía tiempo que le daba vueltas a la idea de
crear una marca diferente de joyas y durante el confinamiento vi que era el
momento y me puse manos a la obra. Además, soy una persona muy creativa, y
diseñar las diferentes colecciones de Amalfi me ha permitido aplicar ese don.
Se me da muy bien imaginar, indagar sobre tendencias, dibujar…, así que he
disfrutado mucho dando vida a cada una de las piezas.
La
marca cuenta actualmente con las colecciones Pompeya, Furore, Amalfitana y
Minori. Háblenos de todas ellas. ¿En qué se diferencian?
Cada colección está inspirada en alguna
característica concreta de un pueblo de la Costa Amalfitana.
Las diferentes piezas que componen la
colección “Pompeya” están inspiradas
en las monedas y en algunas joyas que se encontraron en las excavaciones
arqueológicas de Pompeya.
Por otro lado, la colección “Furore”
está inspirada en el paisaje “rocoso” que ofrece el pueblo de la Costa
Amalfitana que lleva el mismo nombre de la colección.
Asimismo, la colección Amalfitana está
inspirada en Amalfi. La tradición marítima de este bello pueblo nos sirvió para
crear una colección que nos recordara a los cabos utilizados por los antiguos
galeones que procedían de tierras lejanas.
Por último,
la colección “Minori” está inspirada en los restos encontrados en las villas de
vacaciones romanas del S. I d.C. situadas en pueblos marineros del sur de
Italia como Minori.
TRIBUNA DE OPINIÓN - Aumenta el impacto de tus reuniones online
Psicólogo
motivacional, experto en empresa y deporte. Profesor IE Business. Coach ejecutivo y autor de los libros
“El viaje del líder”, “La experiencia de resetearse” y “Poderoso como un niño”.
www.jmiguelsanchez.com
Zoom, Teams, Google Meet, Hangout, GoToMeeting, Webex, Skype
empresarial, etc. Todos ellos son términos con los que nos hemos
familiarizado durante el último año. Pertenecen a plataformas que nos
permiten realizar reuniones online.
Cada uno podemos
tener nuestra preferida o con la que mejor trabajamos, sin embargo, esto no es
lo importante. Lo verdaderamente relevante es el uso que hacemos de nuestro
tiempo en dichas plataformas.
En mi trabajo
diario uno de los retos que más me estoy
encontrando es que los profesionales siguen dedicando mucho tiempo a reunirse
y, además, no están siendo productivos en las reuniones.
Es habitual
encontrar comentarios del tipo; “os tengo que dejar porque tengo otra reunión”, “mañana seguimos que me están esperando en otra sala (virtual)”, “seguid vosotros que yo tengo comité”, “llevamos 2 horas y
seguimos dando vueltas a lo mismo”…
Cada uno de estos
comentarios implica agendas repletas de reuniones infinitas en número y, demasiadas veces, en duración. Si a esto unimos que nuestro cerebro
se cansa más cuando trabaja
virtualmente que cuando lo hace en presencial, nos encontramos con
profesionales agotados. Muchas personas están rindiendo muy por debajo del 100% debido a lo crítico de la situación para muchas empresas, al cansancio por
el trabajo virtual, y también a unas reuniones
improductivas.
¿Qué pueden hacer los líderes para conseguir unas reuniones online más productivas y mejor gestionadas?
Una vez que se ha
decidido que hay que hacer una reunión con varios miembros de una empresa, hay varios tips que nos
pueden ayudar a mejorar en este aspecto tan relevante en la actualidad.
Antes de la reunión.
La agenda. Como en las
reuniones presenciales, la agenda se prepara con anterioridad. Hay un
responsable de pedir los temas que se van a tratar y los tiempos previstos para
cada uno de ellos. También es importante
saber qué se espera
conseguir tratando este tema, ¿hay que tomar una decisión?, ¿hay que analizarlo
o debatirlo?, ¿es sólo informativo?, etc. Esta agenda debería enviarse al menos 24h antes de la reunión. Se puede utilizar alguno de los
calendarios digitales que todos tenemos, para poner un recordatorio con cierta
antelación.
Plantillas. Si no se tienen
plantillas, es bueno crearlas para ahorrar tiempo y ser más eficientes en el trabajo. Se pueden
diseñar para la agenda,
las presentaciones o el acta.
El dispositivo. Tanto si eres
el organizador de la reunión, como si eres uno
de los integrantes de la misma, prepara con anticipación el dispositivo que utilizarás, comprobando que la cámara, el micrófono y cualquier otra utilidad que pudieras necesitar, funcionan
perfectamente. Esto evitará muchas pérdidas de tiempo tratando de hacer que la
tecnología funcione.
Durante la reunión.
El moderador. En toda reunión debe haber alguien que juegue este rol.
Su objetivo es conseguir que todo el mundo participe y, sobre todo, que se
cumplan los tiempos en cada tema y en conjunto en la reunión. Se encargará de dar permisos y quitarlos, para que todo el mundo pueda
participar, reduciéndose así las pérdidas de tiempo y la monopolización de la conversación por parte de algunos miembros.
El tiempo. Si cada uno tiene
un tiempo establecido y el moderador realiza su trabajo, no debería haber problemas. Sin embargo, la
realidad no siempre es así. En caso de que el
tiempo de un tema se nos vaya de las manos, porque no lo calculamos bien cuando
lo establecimos o porque el tema está generando más debate del
esperado, es el momento de tomar una decisión sobre el mismo. Podemos elegir cortar el tema y seguirlo en otra
reunión o decidir
posponer alguno de los que tendríamos que tratar para darle más espacio a éste, que se ha
convertido en prioritario.
Estar presente. Es clave
habilitar la cámara para que todas
las personas puedan verse e interactuar mejor. En online, el cerebro sufre porque trata de completar lo que no ve
sobre su interlocutor. Por tanto, cuanto más se nos vea mejor. De igual manera, mostraremos nuestro interés asintiendo o expresando con gestos de
la cara nuestro acuerdo o desacuerdo con lo que se está tratando. Obvia decir que mientras
estamos en la reunión, nos olvidamos
del teléfono o el mail, para poder centrarnos
completamente en lo que se está tratando en la misma.
Pausas. Si la reunión va a durar más de 2 horas, plantear pausas de 5-10 minutos para que las
personas puedan levantarse, ir al baño o tomar un refrigerio que les permita liberar algo de la tensión y cansancio que producen las reuniones online.
Siguientes pasos. Finaliza
siempre las reuniones con acciones a llevar a cabo. Un grupo de profesionales
que se reúne en torno a un
objetivo, debe salir con algo distinto a lo que entró en dicha reunión. Si no se
proponen nuevos pasos a dar, fechas de cumplimiento y responsables de los
mismos, ¿qué sentido ha tenido ese tiempo dedicado
por varias personas de la compañía?
Tras la reunión.
Acta. Alguien debe encargarse
de tomar notas que se convertirán en un acta que se enviará antes de 24h a todos los miembros. Estamos acostumbrados a actas
de varias páginas que después casi nadie se lee. Mi propuesta es un
documento de 1-2 hojas como máximo en el que se
indique el tema tratado, las acciones que salen del mismo, los responsables de
llevarlas a cabo y el plazo de ejecución. Es un acta que en muchos casos puede enviarse unos minutos
después de haber
concluido la reunión, puesto que se va
completando durante la misma.
En definitiva, no
importan la plataforma en la que trabajemos, la clave es hacer todo lo posible
para que las reuniones comiencen y finalicen en el tiempo estimulado habiendo
conseguido hitos durante la misma y planteado otros para siguientes reuniones.