Juan ComasEn el 25 aniversario de AENOR, el presidente de la asociación Manuel López Cachero se siente cien por cien satisfecho de los logros alcanzados por la entidad durante este tiempo. Y lo está no sólo por las buenas cifras de negocio, la expansión y el reconocimiento nacional e internacional del que goza la asociación, sino porque cree firmemente que el trabajo realizado durante este cuarto de siglo “ha sido muy positivo para el desarrollo de España”. López Cachero se califica como un simple testigo del buen hacer de AENOR y confiesa estar encantado de ocupar esa posición “ya que quien debe recibir los aplausos es la extraordinaria plantilla de la asociación, que ha llevado a AENOR a ser la mejor dentro de su sector de actividad”, apunta
AENOR cumple 25 años de vida ¿qué balance realiza su presidente en este cuarto de siglo?
El balance de estos 25 años es positivo y se resume fácilmente. Nacimos cuando España entraba en la Unión Europea, en ese momento se creía que la libre circulación de mercancía iba a perjudicar la industria española, y nada más lejos de la realidad, ya que ahora es más fuerte que nunca y durante estos 25 años hemos vivido el mejor periodo de progreso económico y social del país. En este cuarto de siglo de vida AENOR ha crecido enormemente, en un principio sólo estábamos presentes en España y ahora contamos con organizaciones propias en 13 países, aunque tenemos presencia en unos 60. Nuestro éxito durante este tiempo va unido a la apuesta de España por la calidad; nuestro trabajo en la normalización y certificación de la calidad era necesario y los grandes logros conseguidos por AENOR en este campo me producen gran alegría, pero también mucha responsabilidad, porque ahora debemos afrontar el reto de ser capaces de continuar haciéndolo. A partir de este momento, AENOR debe plantearse cómo enfocar los siguientes 25 años, porque para que el éxito se consolide hace falta seguir siendo útiles para una sociedad cada vez más exigente con los servicios que se le prestan. La calidad no se alcanza nunca de manera perfecta, siempre hay objetivos nuevos que cumplir y exigencias a las que dar respuesta, por tanto, todo lo que hemos conseguido a lo largo de nuestra historia nos compromete mucho para el futuro, de lo contrario, “mataremos” una herramienta que ha sido muy útil para este país.
¿Hacia dónde irá AENOR en los próximos 25 años?
Buscamos mantener el nivel de exigencia y de rigor de la entidad teniendo en cuenta las nuevas realidades. Hace 25 años el compromiso medioambiental estaba muy limitado a unos sectores concretos, hoy en día apenas se habla de medioambiente, ahora se habla de sostenibilidad, porque la sociedad ya es consciente de que el desarrollo debe existir siempre y cuando se salvaguarden las exigencias medioambientales. Uno de nuestros retos ahora mismo es seguir mejorando todo lo que ya hemos conseguido en términos de sostenibilidad, estamos muy satisfechos de haber sido la primera empresa española, y una de las primeras cinco mundiales, en ser acreditada por la ONU para la puesta en marcha del mecanismo de desarrollo limpio del protocolo de Kyoto. La alimentación es otro de nuestros campos de actuación, por eso hemos puesto en marcha un laboratorio, el cual está teniendo una demanda creciente, cuyos logros queremos aplicar a todo el sector de la alimentación. La seguridad en la industria y en la información son otros grandes sectores en los que trabajamos actualmente para desarrollar instrumentos que garanticen la seguridad en los mismos. La seguridad de las personas físicas es otro tema a afrontar con especial esfuerzo en el futuro, sobre todo para las personas que padecen una discapacidad, ya que, en mi opinión, tenemos la obligación de evitarles problemas y no marginarles.
[Sigue en la versión impresa]
AENOR cumple 25 años de vida ¿qué balance realiza su presidente en este cuarto de siglo?
El balance de estos 25 años es positivo y se resume fácilmente. Nacimos cuando España entraba en la Unión Europea, en ese momento se creía que la libre circulación de mercancía iba a perjudicar la industria española, y nada más lejos de la realidad, ya que ahora es más fuerte que nunca y durante estos 25 años hemos vivido el mejor periodo de progreso económico y social del país. En este cuarto de siglo de vida AENOR ha crecido enormemente, en un principio sólo estábamos presentes en España y ahora contamos con organizaciones propias en 13 países, aunque tenemos presencia en unos 60. Nuestro éxito durante este tiempo va unido a la apuesta de España por la calidad; nuestro trabajo en la normalización y certificación de la calidad era necesario y los grandes logros conseguidos por AENOR en este campo me producen gran alegría, pero también mucha responsabilidad, porque ahora debemos afrontar el reto de ser capaces de continuar haciéndolo. A partir de este momento, AENOR debe plantearse cómo enfocar los siguientes 25 años, porque para que el éxito se consolide hace falta seguir siendo útiles para una sociedad cada vez más exigente con los servicios que se le prestan. La calidad no se alcanza nunca de manera perfecta, siempre hay objetivos nuevos que cumplir y exigencias a las que dar respuesta, por tanto, todo lo que hemos conseguido a lo largo de nuestra historia nos compromete mucho para el futuro, de lo contrario, “mataremos” una herramienta que ha sido muy útil para este país.
¿Hacia dónde irá AENOR en los próximos 25 años?
Buscamos mantener el nivel de exigencia y de rigor de la entidad teniendo en cuenta las nuevas realidades. Hace 25 años el compromiso medioambiental estaba muy limitado a unos sectores concretos, hoy en día apenas se habla de medioambiente, ahora se habla de sostenibilidad, porque la sociedad ya es consciente de que el desarrollo debe existir siempre y cuando se salvaguarden las exigencias medioambientales. Uno de nuestros retos ahora mismo es seguir mejorando todo lo que ya hemos conseguido en términos de sostenibilidad, estamos muy satisfechos de haber sido la primera empresa española, y una de las primeras cinco mundiales, en ser acreditada por la ONU para la puesta en marcha del mecanismo de desarrollo limpio del protocolo de Kyoto. La alimentación es otro de nuestros campos de actuación, por eso hemos puesto en marcha un laboratorio, el cual está teniendo una demanda creciente, cuyos logros queremos aplicar a todo el sector de la alimentación. La seguridad en la industria y en la información son otros grandes sectores en los que trabajamos actualmente para desarrollar instrumentos que garanticen la seguridad en los mismos. La seguridad de las personas físicas es otro tema a afrontar con especial esfuerzo en el futuro, sobre todo para las personas que padecen una discapacidad, ya que, en mi opinión, tenemos la obligación de evitarles problemas y no marginarles.
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