Bienvenido a Sector Ejecutivo, revista de Economía y Empresas / España, Nº 297 Abril de 2024

Juan Echevarría Puig, presidente de Mutua Universal

Juan Comas

Licenciado en Derecho, Graduado en Estudios Superiores de Empresa por el Instituto de Estudios Superiores de la Universidad de Navarra y Diplomado en Relaciones Industriales por la Universidad de Massachusetts, Juan Echevarría Puig siempre ha compaginado su labor empresarial y su carácter emprendedor con una clara vocación social.
Hoy, hacemos un repaso por la vida profesional del actual presidente de Mutua Universal, mutua colaboradora con la Seguridad Social número 10 que presta servicios a más de 160.000 empresas asociadas y a más de 1.300.000 trabajadores.

Nos consta que empezó su trayectoria profesional muy joven, mientras compaginaba estudios y trabajo. ¿Es así?
Es cierto. Empecé a trabajar con 17 años, como auxiliar en Banesto, en Barcelona, mi ciudad natal. Pero nunca dejé de estudiar, me licencié en Derecho por la Universidad de Barcelona. Luego vino el Grado en Estudios Superiores de Empresa de la Universidad de Navarra y la Diplomatura en Relaciones Industriales.
Repasando su amplio currículum profesional, además de presidente de FECSA, Nissan Motor Ibérica AISA o Cable y Televisión de Cataluña, vicepresidente de Endesa, usted siempre ha tenido muy presente un interés por las labores sociales, como atestigua su paso por la Fundación Guttmann o el Consejo Social de la Universidad Pompeu Fabra. ¿Es así?

Es cierto. Siempre he intentado que así sea.
Me siento especialmente orgulloso de mi paso por la presidencia de la Fundación Instituto Guttmann. Desde ahí pude trabajar por y para esta iniciativa social sin ánimo de lucro que promueve la rehabilitación de personas afectadas por lesión medular, daño cerebral adquirido u otra discapacidad de origen neurológico.
He tenido también compromiso político. El 10 de diciembre de 1975 lo paso con Manuel Fraga confeccionando un nuevo Gobierno. La verdad es que Fraga dictaba y yo anotaba y sugería. Pero el Rey revalida a Arias y Fraga, contra mi opinión, acepta la Vicepresidencia y el Ministerio del Interior. Por lealtad a Fraga me encargo de la Dirección General de Correos y de la Presidencia de la Caja Postal. Dimite Fraga, soy el único testigo de su dimisión al Rey, y me voy con Fraga. Recibo miles de cartas y telegramas de carteros y otros empleados pidiendo me quede. El periódico Informaciones titula (perdón por recordarlo) “Hombres así no debieran dimitir jamás”. Pero me voy.

En 2004 inicia usted su andadura como presidente de Mutua Universal, una asociación sin ánimo de lucro que colabora con la Seguridad Social en la gestión de prestaciones como las contingencias profesionales o la incapacidad temporal. Aquí también existe una gran labor social, ¿verdad?
Claramente. Las Mutuas Colaboradoras con la Seguridad Social contribuimos al sostenimiento de los servicios comunes del sistema de la Seguridad Social desde la agilidad que permite un modelo de colaboración público–privada. Es un modelo que lleva funcionando durante muchas décadas y ha resultado eficaz porque aporta valor para el trabajador, la empresa y, en definitiva, para la sociedad.
Desde Mutua Universal velamos por la salud y el bienestar de nuestros mutualistas, gestionando los servicios y las prestaciones con rigurosidad y excelencia, comprometidos con la sociedad y la sostenibilidad del sistema.

Junto con el desarrollo de la actividad propia como mutua, en Mutua Universal se han centrado en el compromiso social en ámbitos como el de las ayudas sociales. ¿En qué consiste esta encomiable labor?
Disponemos de una Comisión de Prestaciones Especiales que se encarga de gestionar la reserva de asistencia social, estudiando y atendiendo situaciones de especial necesidad mediante acciones concretas, orientadas a mejorar la protección de los trabajadores y/o sus familiares que se han visto afectados en su calidad de vida tras haber sufrido un accidente de trabajo o enfermedad profesional.
Para que se haga una idea de la importancia que tiene para nosotros esta área, en 2018 se superaron los tres millones de euros en ayudas sociales.

La Mutua Universal de 2019 es el resultado de una larga trayectoria de 112 años de firmeza en sus propósitos, de valores, principios y de adaptación a circunstancias históricas, políticas y económicas, con sus errores corregidos. En resumidas cuentas, una historia de esfuerzo, oportunidades y de grandes retos. Desde todo ello, ¿cómo ve a Mutua Universal en los próximos años?
Mutua Universal continuará trabajando, como no puede ser de otra manera, desde la responsabilidad y la transparencia, por el bienestar de los trabajadores protegidos y contribuyendo a la sostenibilidad del Sistema de la Seguridad Social.
La Mutua también proseguirá aumentando la colaboración con entidades públicas y privadas para el desarrollo de nuevos servicios, y seguirá extendiendo su compromiso social a otros ámbitos, como ayudas sociales a los trabajadores y las familias afectadas por un accidente laboral de gravedad.
Además, en los próximos años Mutua Universal continuará con su transformación digital aportando soluciones innovadoras y personalizadas que se adapten a las necesidades de los asociados para mejorar los servicios.

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