Bienvenido a Sector Ejecutivo, revista de Economía y Empresas / España, Nº 297 Abril de 2024

Guillermo de Juan, vicepresidente de GSK España y director en Europa de Relaciones Institucionales y Comunicación

Paloma Serrano

GSK es una compañía biofarmacéutica global cuyo propósito es: juntos, unir ciencia, tecnología y talento para adelantarse a la enfermedad para, hacia finales del año 2030, haber dejado una huella positiva en la salud de más de 2.500 millones de personas. “Para nosotros, ‘adelantarnos’ significa prevenir enfermedades -contamos con la mayor cartera de vacunas del mundo- pero también significa adelantarse al empeoramiento de los síntomas, además de cambiar su curso al tratarlos, con medicamentos. Y es que la prevención es la mejor medicina, y la mejor inversión tanto para los pacientes como para los sistemas sanitarios y las economías. No se trata sólo de vivir más tiempo, se trata de vivir mejor”, puntualiza Guillermo de Juan, vicepresidente de GSK España y director en Europa de Relaciones Institucionales y Comunicación de la compañía en Europa.

GSK se destaca por su enfoque integral de prevención. ¿Cómo se traduce este enfoque en las prácticas y productos de la compañía, y cuál es su importancia en la estrategia global de GSK?
Las personas cada vez vivimos más tiempo, hecho que genera necesidades en salud más complejas a medida que aumenta la carga de las enfermedades crónicas. Además, con demasiada frecuencia, nuestros sistemas de salud se centran en el tratamiento reactivo, lo que significa que las personas viven con enfermedades que podrían haberse prevenido o controlado antes. La mayor contribución que podemos hacer desde GSK para prevenir y cambiar el curso de las enfermedades es a través de nuestra innovación. Es por eso por lo que hemos creado una de las carteras de vacunas más amplias de la industria para ayudar a proteger a las personas en todas las etapas de la vida, desde la niñez hasta la vejez. Estamos convencidos de que invertir en prevención produce mejores resultados en salud, es rentable y las personas más sanas están en mejores condiciones de contribuir a las economías y sociedades en general.

En un contexto empresarial cada vez más consciente, ¿cómo aborda GSK los aspectos medioambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG)?
Nuestra mirada va mucho más allá de la investigación y el desarrollo de medicamentos y vacunas innovadoras que cambian vidas. Hemos desarrollado la primera vacuna frente a la malaria, precalificada por la OMS, que ya está siendo utilizada en un programa de vacunación piloto en varios países de África, y desarrollamos el primer antirretroviral para el VIH hace más de 40 años. Pero sabemos que nuestro éxito no sólo reside en nuestras fórmulas científicas, sino en el alma de nuestra organización: nuestros equipos de personas. Cuidamos la salud y el bienestar de nuestros empleados y sus familias a través de numerosos programas e iniciativas, y promovemos un entorno donde cada persona genera un impacto positivo no sólo en su propia vida, sino también en la sociedad. Todo ello sin olvidar que, sin un planeta sano, no puede haber personas sanas. Fuimos pioneros en materia medioambiental, ya que en 1999 recibimos el certificado EMAS por nuestra gestión medioambiental excelente. En la actualidad, nuestro objetivo es lograr un impacto neto cero en el clima y un impacto neto positivo en la naturaleza, con metas ambiciosas establecidas para 2030 y 2045.

¿Cómo percibe al sector farmacéutico en España como potenciador del crecimiento, especialmente en términos de inversión en I+D y generación de empleo cualificado?
La industria farmacéutica es un sector estratégico clave en España y uno de los principales dinamizadores de la economía de nuestro país en grandes ámbitos como la inversión en I+D, la producción, la exportación y el empleo de calidad. La inversión en I+D de medicamentos por parte de nuestro sector alcanzó un máximo histórico en 2022 en España, al destinar casi 1.400 millones de euros a estas actividades. Además, es una industria con un fuerte compromiso social, que se traduce en su constante búsqueda de nuevos medicamentos que salven vidas y mejoren la calidad de vida de los pacientes, así como en su trabajo por la igualdad de género, la sostenibilidad, el cuidado del medio ambiente y la generación de empleo estable, cualificado, joven e igualitario.

GSK ha sido evaluada como excelente en todas las categorías del Plan Profarma. ¿Puede compartir algunos aspectos clave que han contribuido a este reconocimiento?
En los últimos 5 años en GSK hemos invertido más de 320 millones de euros en I+D en España, y en Tres Cantos (Madrid) contamos con un centro de I+D único en el mundo 100% focalizado en el desarrollo de soluciones frente a enfermedades que asolan los países en desarrollo. En Aranda de Duero (Burgos) tenemos un centro de producción clave para GSK a nivel mundial con más de 40 años de historia donde trabajan más de 600 personas. Esta fábrica exporta más del 90% de los medicamentos que produce, y se espera que su inversión para el periodo 2023-2024 sea de un total de 30 millones de euros. Sin olvidar que GSK España es el segundo país con mayor volumen de investigación clínica dentro de los que opera la compañía, que hemos sido reconocidos por varios rankings como una de las mejores empresas para trabajar en nuestro país y que hemos obtenido la primera posición en el Índice de Acceso a los Medicamentos desde su creación en 2008.